El domingo pasado me decidí a probar la sala 3D del Yelmo, el multicine de la zona comercial Area sur de Jerez. La sala está dividida en dos zonas, una roja central con alrededor de un cuarto de las butacas y los laterales y zonas superior e inferior. La entrada en la zona roja central cuesta 9.3 euros 60 centimos más que en el resto, debido no sólo a su posición central sino tambien a que las butacas vibran con los sonidos grabes en función de su intensidad, así por ejemplo podemos sentir las pisadas de un tiranosaurio en nuestras nalgas cada vez más fuerte conforme se acerca. En Los mundos de Coraline no amorticé los 60 centimos. Para poder ver en 3D la película es necesario usar unas gafas especiales que nos dió el acomodador al entrar en el cine junto con una toallita para limpiarlas, en una animación previa a la película se nos advierte que las usemos sólo sentados en la butaca si no queremos bajar las escaleras cómo uno de nuestros socios forajidos al que desde aquí mando un saludo y deseo una pronta recuperación. El 3D en si resulta bastante atractivo y se pueden conseguir vistas y efectos realmente espectaculares que sorprenden al espectador, el que más me llamó la atención y creo que más característico, fué el de tener la impresión en algunos momentos de que los personajes y objetos salian de la pantalla y se movian por la sala.
Pasando al argumento está basada en la novela de Neil Gaiman, narra la historia de una niña que encuentra una versión mejorada de su vida en un universo paralelo al atravesar uno de los muros de su casa: sus padres son más considerados con ella, pero la maravilla dará paso al miedo y angustia. Debido a su duración 101 minutos y a que no tiene golpes de humor ni demasiadas escenas musicales puede resultar aburrida para los más pequeños. Para mi es un buen cuento para niños y mayores estupendamente llevado a la animación y que os recomiendo.
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